Glosario
Pluralidad: “Se
refiere una multitud o número grande de
algunas cosas conviviendo en un mismo ambiente o ámbito. Y por otra parte, pluralidad
también refiere a la cualidad o condición de ser más de uno”
Incidencia: Es cuando a partir de experiencias obtienes la capacidad de actualizar las agendas en los colectivos ciudadanos.
Empoderamiento: “Es un
proceso que contribuye a que las personas y sus organizaciones puedan ser,
hacer y decidir por sí mismas”.
Interacción: Es la acción recíproca entre dos o más agentes que permite obtener información desde diferentes perspectivas.
hibridación cultural: “procesos socioculturales en los que las estructuras o prácticas discretas, que existían en forma separada, se combinan para generar nuevas estructuras, objetos y prácticas”.
Audiencias: Concepto construido por el discurso social y académico para designar el público que supuestamente interactúa con un medio de comunicación, ya sea cine, televisión, radio, etc. el cual es, a su vez, constructor de las diferentes tipologías de audiencias que dependen de ciertas variables tanto sociológicas como psicológicas del individuo "participativo"
En
la actualidad la radio ha reducido su
programación a simples noticias e informes periodísticos, abandonando su dimensión
creativa, mostrando una programación trillada que se limitan a combinar música
e información, excluyendo la participación de la ciudadanía, el sentir de los
oyentes, la democratización como elemento clave en la esfera pública, perdiendo
un mayor impacto e incidencia de los
proyectos que se avoquen a tratar problemas sociales, y es que la información y
comunicación son fundamentales para el desarrollo que implica innovación, esa
identificación de los oyentes, que responda a sus necesidades de la comunidad,
que sea esperanza y voz de los pueblos.
La radio realmente está más cerca de la gente
y la necesidad de escuchar no se limita
únicamente a los que están del lado de los receptores, sino debe involucrar
tanto a los gobiernos como a los ciudadanos, a los pobres y a los ricos, a los
planificadores y a su población y así que se escuche la voz hasta del más débil, donde
los comunicadores hay que ser audaces, inventar, crear , inventando nuevas y
mejores formas de producir radio puesto que se ha puesto demasiado énfasis en
la información pero debemos comunicar y es verdad que lo informativo es clave
pero no debemos dejar de lado otros formatos como los dramatizados, formatos
que involucren mas a la ciudadanía.
Pero
¿Cómo lograr que se escuche la voz de todos en un país multicultural? Y donde la
radio y medios de comunicación están centralizados, hay radios musicales, otras
con programación mixta en la que se combina música e información y sólo un
grupo menor de radios corresponden al área de la información, de la educación y
promoción del desarrollo; éstas se ubican fundamentalmente en Frecuencia
Modulada y en las grandes ciudades como Lima con una oferta muy variada y
expresaría búsquedas, convergencias pero también conflictos de identidades culturales.
Siendo
un país multicultural debemos intentar escuchar a todos y cómo si no es a través
de los medios de comunicación como la radio, para ello Rodriguez, Franciso (2002,
p.15), nos sugiere la hibridación cultural, que deja privilegia
el resultado de los elementos culturales que se encuentran y deja de lado las contradicciones
que los separa.
Ante
ello es clave que desde las emisoras y
las redes se contribuyan a la afirmación de los derechos culturales de las personas,
de los pueblos andinos y amazónicos, generando espacios de diálogo y sinergias,
que implique generación de espacios de reflexión y debate sobre comunicación,
cultura, desarrollo, y sobre la relevancia de la construcción de relaciones
interculturales en nuestro país, teniendo en cuenta que vivimos en un contexto
de globalización.
Dentro
de los estudios de Geovanni Acate & otros (2006) se nos proyecta la labor
de la CNR, pues ésta convoca a que las
radios asuman el papel de fiscalización a la gestión pública, a través de la
afirmación ciudadana y del fortalecimiento de la sociedad civil, así mismo plantea
el reconocimiento de la diversidad y la divergencia para el enriquecimiento de
la democracia, proponiendo el fortalecimiento del Estado “como
agente impulsor de sectores emergentes en el campo económico, de conductor de
políticas públicas consensuadas que promuevan la equidad, de agente prestador
de servicios y administrador de los bienes públicos, desde un enfoque de
derechos ciudadanos”; y es que colocar sentido a la labor de los comunicadores en
radio es darle vida a la radio misma, pues la radio es del pueblo y para el
pueblo no un simple medio comercial con las palabras contadas y estándares de cómo llevar la información, olvidándose de
una radio participativa, inclusiva, unificadora que no nos vuelve homogéneos sino
en la diversidad ser parte de un todo democrático.
Según
autores como Beltrán (1980 p. 40) Los principios de la comunicación
“participativa” se sustentan en la propiedad comunitaria de los medios de
comunicación, en los contenidos favorables a los cambios sociales y a los
flujos horizontales de comunicación, es así que una comunicación “horizontal”
es así considerada como un proceso de interacción social en el cual intercambio
igualitario entre los seres humanos estaría sustentado en el diálogo y en la
participación. Se puede hablar entonces de una radio como medio de comunicación
descentralizado, donde se opte por la pluralidad
y el establecimiento de puentes de diálogo puesto que en países como el nuestro
no puede operar la regla de la mayoría, pues el pluralismo presupone tolerancia
puesto que afirma que la diversidad y el
disenso son valores que enriquecen al individuo y también a su ciudad política.
Pero
¿Qué ofrece la descentralización como proceso democratizador?, brinda a las
regiones, provincias y distritos del país un conjunto de oportunidades y retos
que tienen que ver con el desarrollo y la afirmación de la construcción de
comunidades democráticas, con capacidad para emprender procesos de desarrollo
económico y social de carácter territorial, y es que apoyar el proceso de
descentralización al tiempo de promover la gobernabilidad democrática en
ámbitos locales y regionales, es un eje del trabajo presente y futuro del
movimiento de radio educativa y comunitaria, y es ésta la que implica una expresión de la diversidad, en el marco de
un proceso de globalización, promoviendo el reconocimiento y el respeto las
diferencias, así disminuir la constante
agresión cultural y la exclusión.
Y
es que como afirma en sus estudios Paula Castello & Ximena Tordini (2006,
p.7) la radio puede ser un espacio de transformación. Sus sonidos son las voces
de los proyectos político comunicacionales. Expresa intenciones: quiere
movilizar, convocar, quiere crear, acercar, dialogar, quiere reír, emocionar,
porque todo esto es provocar un cambio en el orden hegemónico instituido. La
manera en que se constituye el sonido de la radio, la formación de un lenguaje,
la definición de los temas que formarán parte de la agenda, el tratamiento que se
dará a esos temas, son todas decisiones que están implicadas en el arduo
proceso de producción. Y son decisiones tan políticas como la definición misma
del proyecto político cultural y comunicacional. Es la traducción práctica de
los enunciados que definen al proyecto. Es un espacio de disputa de sentidos,
de construcción de una alternativa. Desde las radios comunitarias se pone en
evidencia que el sistema no es inevitable. Esta certeza debe expresarse en la
coherencia entre la forma de ver el mundo y los modos de narrarlo, tanto al
mundo que existe como a ese otro mundo posible. La radio es un espacio de
construcción.
Carlos
Camacho Azurduy (2007), afirma a pesar de que nos permitimos calificar la audiencia como “su majestad”, muy poco
es lo que hemos avanzado en los medios de comunicación para su conocimiento y
comprensión, puesto que proclamamos, en voz alta y con mucho orgullo, que
nuestras acciones están al servicio de las necesidades e intereses de los
movimientos sociales y populares; sin embargo, no consideramos sus demandas y
expectativas en nuestro trabajo diario porque no las conocemos.
Son
los medios de comunicación deben llevar la responsabilidad de abogar por una
sociedad justa y democrática; es el medio radial más próximo a la población,
sin embargo a lo largo del tiempo la corrupción ha hecho callar la voz del
comunicador sembrando desconfianza en el público por ello, la vigilancia y el
control de la sociedad civil es un tema clave en el marco de un proceso de
afirmación democrática a fin de disminuir el impacto del flagelo social que
vivimos ya sea con la dictadura gobernó al país en casi toda la década del 90
dejando como pasivo el descrédito de las instituciones, la desconfianza de la
población en sus autoridades, las suspicacias a veces exageradas pero
comprensibles respecto al manejo de los recursos públicos que nos hace pensar
que la corrupción no desaparecerá de los diferentes niveles de gobierno.
Por
ello existen entidades como la CNR y sus
emisoras socias, en casos vinculados a autoridades locales y regionales,
siempre ha ejercido un rol de vigilancia, trabajo que no sólo ha estado
referido a temas de corrupción sino también al cumplimiento de promesas de
política pública y que no necesariamente implican corrupción aunque sí
irresponsabilidad y faltas de carácter ético; y es que las emisoras no sólo deberían
ser instituciones de intermediación
entre autoridades y sociedad, sino las que vayan construyendo propuestas y generando
iniciativas destinadas a promover la solidaridad, el trabajo comunitario, la
vigilancia de la gestión pública, la defensa del medio ambiente, de los
derechos humanos y la movilización de las personas y colectivos en torno a visiones
compartidas de desarrollo.
Se
debería optar también por un rol del
periodismo de investigación, un periodismo de
investigación al servicio de la comunidad y no al servicio de
determinados intereses que buscan destruir a una autoridad para deslegitimar el
régimen o la propia lucha contra la corrupción, porque cuando todos y todas son
o pueden ser corruptos entonces “no hay corrupción”.
Todo
el trabajo radial avocado a la integración también debe ir de la mano con la
creatividad pero ¿Se puede hablar de creatividad como atributo de
la información radiofónica? Por supuesto que sí, pero lo que sucede es que el
concepto de creatividad no debe contemplarse desde una perspectiva
reduccionista. Según Miguel Ángel Ortiz
(2009 p. 243), En el caso
de la radio, su estética y su creatividad descansan en la “disposición para” y
la “capacidad de” utilizar plena y expresivamente todos los materiales del
discurso y del lenguaje sonoro con vistas a captar y conservar la atención de
los oyentes, impresionándoles emotiva y sensorialmente. Su
estética contribuye a promover las vanguardias culturales y las calidades de la
programación radiofónica, creatividad y a la vez ese involucrarse con las
audiencias.
Por ejemplo en los estudios de Claudia Pereira, “los Sistemas de Información Agraria y las radios rurales” proyecta sobre el desafío de hacer programas de radio que le gusten a la población rural, que les penetre al corazón y a la razón; que logren esa identificación, que responda a sus necesidades e intereses para lograr su propio desarrollo y el de la comunidad, donde exista esos mecanismos de retroalimentación e interacción puesto que no se trata de dar información mediante la radio se trata de comunicar, esa comunicación clave para el desarrollo y la inclusión de los oyentes, y no es difícil si se utiliza la creatividad dejando atrás la monotonía de programas con formatos repetitivos, por ejemplo a través de radionovelas donde la comunidad al escuchar se sienta incluido, identificado , reflejado su modo de vida, su problemas y logre visualizar alternativas de solución , sintiéndose parte de la radio.
Por ejemplo en los estudios de Claudia Pereira, “los Sistemas de Información Agraria y las radios rurales” proyecta sobre el desafío de hacer programas de radio que le gusten a la población rural, que les penetre al corazón y a la razón; que logren esa identificación, que responda a sus necesidades e intereses para lograr su propio desarrollo y el de la comunidad, donde exista esos mecanismos de retroalimentación e interacción puesto que no se trata de dar información mediante la radio se trata de comunicar, esa comunicación clave para el desarrollo y la inclusión de los oyentes, y no es difícil si se utiliza la creatividad dejando atrás la monotonía de programas con formatos repetitivos, por ejemplo a través de radionovelas donde la comunidad al escuchar se sienta incluido, identificado , reflejado su modo de vida, su problemas y logre visualizar alternativas de solución , sintiéndose parte de la radio.
Para A l f o n s o G u m u c i o D a g r o n
(2001 p. 15) La radio ha sido durante más de cincuenta años el
instrumento más atractivo para la comunicación y el desarrollo participativos.
Sin duda es la herramienta comunicacional más extendida en el mundo y el medio
ideal para provocar cambios sociales, sin embargo hay que tener en cuenta las
barreras idiomáticas y la escasa visibilidad internacional que tienen la mayor
parte de las experiencias comunitarias, las cuales han sido la causa de muchos
malentendidos en las organizaciones para el desarrollo e incluso en las
instituciones académicas, sobre la esencia de las prácticas de comunicación
participativa que abundan en nuestro país y los países llamados “en vías de
desarrollo”; y es que la palabra “participación”
es caleidoscópica; cambia de color y de forma según la voluntad de las manos
que la sostienen y las experiencias de comunicación participativa para el cambio
social son tan diversas como los ámbitos culturales y geográficos donde se
desarrollan.
Miguel Ángel Ortiz (2009) La creatividad como valor añadido en los
contenidos informativos Creatividad y Música. Creatividad y Sociedad.
Beltran (1980). “A farewell to Aristotle: “Horizontal”
communication”, Communication Vol. 5,
p. 5-41. Gordon and Breach, Science
Publishers.
Gumucio Dagron, Alfonso (2001). Haciendo Olas: Historias de Comunicación Participativa para el
Cambio Social. Plural Editores. La Paz .p-15
Paula Castello y Ximena Tordini (2006) El cantar de las
hormigas Producción periodística en las
radios comunitarias. Asociación Mundial de Radios Comunitarias
UNESCO
CAMACHO AZURDUY, Carlos Alberto (2007). Las radios populares
en la construcción de ciudadanía. 1 ed .
Bolivia- p.17
Paginas
especializadas
http://www.comunicacionpopular.org/wp-content/uploads/2011/11/El-cantar-de-las-hormigas_completo.pdf